En esta primera entrada os voy a hablar de nuestra experiencia en el maravilloso paraje de #SierraNevada, en Granada.
Sin duda es un lugar donde el sol y los buenos servicios hacen las delicias de los esquiadores, pero, para las familias que no esquiamos, la cosa se complica un poco.
La verdad es que la web oficial de la estación está, lógicamente, enfocada al esquí, y la información para no esquiadores es, para mi gusto, algo confusa y escasa, sobre todo si no se conoce el sitio en persona. Por otro lado, hablamos de un "mundo paralelo" como yo digo, donde se ve un nivel de vida nada modesto, por lo que, si no se va con todo planificado antes de subir... el viajecito puede resultarnos bastante caro.
Lo primero será buscar un alojamiento. Nosotros conocemos dos sitios, ambos en la parte alta de la estación y reservados por Booking, que es la web con la que solemos hacerlo habitualmente, por su amplitud de servicios y opciones. Todas nuestras escapadas han coincidido con Nochebuena. El primero es el Apartahotel Boabdil, al cual fuimos la Parejade4 el primer año. A pesar de que la calefacción era generalizada y bastante alta, por lo demás todo estuvo estupendo, y fueron unos 360 euros las tres noches en unos apartamentos bastante completos. La gerente fue muy simpática y nos prestó un trineo para no tener que alquilarlo. Las otras dos ocasiones hemos viajado en grupo, 6 adultos y 4 niños, y hemos alquilado un apartamento particular en el edificio San Bernardo. En este caso el precio es mucho menor, unos 300 euros el fin de semana para todo el grupo y, aunque el apartamento está equipado para 6 adultos, el dueño es bastante amable y nos permite colocar un par de colchones hinchables para los niños. Podéis pedirme el contacto si lo necesitáis.
Para nosotros, cuando viajamos, es fundamental el tema de que sea apartamento, ya que esto permite comer de forma más saludable y, por supuesto mucho más económica. Comer en Sierra nevada tampoco es barato barato, así que lo mejor es que traigáis los alimentos de abajo y llevéis un buen plan de comidas pensado...
Otra cosa fundamental que os aconsejamos es ir bien preparados en cuanto a vestimenta. No es necesario ir como profesionales, pero en Decathlon hay pantalones impermeables desde 7.99, botas de montaña desde 9.99 y ropa térmica desde 4.95. Un mono completo puede costar unos 40 euros. Son una inversión que merece la pena, ya que allí el frío y la humedad calan con rapidez, y se acaba mojado sí o sí. Os confirmamos que no es nada agradable.... No olvidéis la crema solar y las gafas de sol. También podéis recurrir a alguien que os preste algo de ropa o a una tienda de segunda mano. No obstante, por allí siempre hay vendedores ambulantes si necesitáis unos guantes, gafas o palas para jugar.
Y ahora viene lo interesante...¿Qué hacer en Sierra Nevada si no se va a esquiar?. Pues, mucho me temo que, si os guiáis por el programa oficial... poca cosa.
Si nos situamos en la plaza principal, llamada Plaza de Andalucía, hay una salida que da a la zona Mirlo Blanco. En esa zona tenemos un trineo ruso, que es como una mini montaña rusa. Dura unos 4 minutos y cuesta 5.20 euros por persona. Eso sí, es probable que los niños que tengan menos de 3 años no den la estatura mínima. Allí mismo, suelen habilitar un par de pistas con inclinaciones para tirarse con trineos o palas. Suele costar entre 10 o 15 euros pasar una media hora en ellas, para niños a partir de 5 años. Os recomendamos la última de estas pistas, ya que, además de tener mayor variedad de materiales: bicis, roscos hinchables..., tiene una cinta transportadora que os permitirá ganar tiempo y energías.
Poco más. Si lo deseáis, podéis gastaros una media de 60 euros para una Parejade4 como nosotros en tomar el telecabina hasta las pistas principales, pero os advertimos de que, ni os permitirán subir con vuestros trineos y palas, ni tendréis nada especial pensado para vosotros allí.
Peeeeerooooo...... no os preocupéis porque nosotros tenemos un par de ideas que os van a solucionar el fin de semana.
La primera: nieve gratis en la zona alta. Debéis dirigiros al edificio San Bernardo, aparcar allí y subir justo detrás de este, bordeando un edificio abandonado que encontraréis. Allí hay una salida de una de las pistas oficiales, y, siempre con supervisión, los peques y no tan peques podréis encontrar un buen manto blanco donde disfrutar gratuitamente de vuestros trineos, palas o bolsas de plástico. Hay unas vistas increíbles y un chiringuito muy apañado con unos precios bastante razonables.
Y el descubrimiento estrella de este año ha sido.....: EL TELESILLAS PARADOR. Por primera vez en tres años, alguien nos habló de estas sillas voladoras como una opción para nosotros. Estos telesillas parten de la parte alta, junto al hotel Rumaykiyya, y por un precio de 4.80 euros la ida o 6.80 euros la ida y vuelta (3.20 y 4 euros para niños hasta 12 años), puedes montar y bajar hasta la Plaza de Andalucía. El viaje dura unos 10 minutos y es apto incluso para los más miedicas, como yo. Las vistas y la altura son impresionantes, pero lo cierto es que son bastante seguros y van muy despacito. Si tenéis oportunidad de hacer la bajada de noche... alucinaréis. Y dejan subir a niños de todas la edades. Eso sí, preguntad bien la hora de la última subida, ya que si tenéis el alojamiento arriba como nosotros... no es aconsejable perderlo y tener que subir todo a pie con niños tan pequeños. Nosotros lo que hicimos fue bajar a mediodía, almorzar en un #100montaditos que hay allí mismo (menos calidad que el resto de bares de la cadena pero mismo precio), y luego subir de vuelta al apartamento. La verdad es que merece la pena y es una forma estupenda de bajar hasta el centro sin tener que mover el coche ni pagar el parking.
Con estas ideas y alguna manualidad o juego de mesa, podréis disfrutar de un buen fin de semana de nieve, y siempre podéis consultar la web oficial por si organizan alguna proyección de cine infantil, o, como nos pilló a nosotros, una bajada navideña con Papá Noel, organizada por uno de los clubes de la zona.
No obstante, nosotros tenemos pensado volver pronto y atrevernos con algún mini curso de snow o esquí... ya veremos hasta donde llega el presupuesto.
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